Según el estudio realizado comprobamos que la mayoría de los encuestados ha tenido que teletrabajar desde sus casas durante el período que ha durado el confinamiento. En general, según este estudio los encuestados indican que su productividad no se ha visto afectada, y que tampoco ha aumentado.
Con este estudio, han cambiado un poco las perspectivas anteriores ante la idea de que con el teletrabajo se podría ver reducida la productividad o calidad del trabajo por el hecho de desempeñar el mismo desde casa.
Aproximadamente, la mitad de los encuestados afirman que el período de confinamiento ha agravado los momentos de ansiedad o malestar personal, y que esto puede deberse a diferentes causas, tales como el aumento de la mortalidad, miedo al contagio, el pasar tanto tiempo dentro del círculo familiar etc.
Un aspecto muy positivo, es que al llevarse a la práctica el hecho de teletrabajar y comprobar que está no ha tenido un impacto negativo en las empresas sino todo lo contrario, el impacto global tiene una valoración muy positiva que debe de estudiarse en el futuro.
Con este estudio, se aboga por un futuro no muy superior a 2 años en el que el teletrabajo forme más parte de nuestras vidas de lo que es ahora debido a todo lo acontecido.